Garantizar el traslado íntegro de tus productos es uno de los factores que debes considerar como negocio que depende del comercio de importación y exportación. Para ello es importante saber cómo tomar ciertas decisiones, por ejemplo la elección entre transporte intermodal y multimodal, cuándo solicitar los servicios de un comercializadora aduanal, o cómo organizar el proceso de embalaje.
Sobre todo este último es esencial en el caso que debas trasladar o esperes productos frágiles, pues de no tratarse con cuidado esta mercancía podría dañarse. Para evitar esto se requiere seguir ciertos requisitos de logística durante el traslado. Conócelos a continuación y asegura la calidad de tus envíos en todo momento.
¿Cómo identificar un “producto frágil”?
Cuando se habla de un producto frágil de inmediato se viene a la mente aquella mercancía que puede romperse, deformarse o rayarse con facilidad durante cualquier etapa del traslado como vidrio, artículos de cerámica y porcelana; electrodomésticos, antigüedades, obras de arte e instrumentos musicales, pero también hace referencia a cualquier objetivo que para ti sea valioso.
Es decir, tal vez tengas ciertos productos que por naturaleza son resistentes, por lo que no habría peligro de daño durante el traslado, sin embargo si esta carga es muy importante para tu negocio, como una precaución extra puedes colocar tus productos dentro de la categoría de “Frágil” para evitar cualquier percance.
Proceso para trasladar productos frágiles
Para realizar el proceso de traslado de productos frágiles debes pactar con tu comercializadora aduanal y empresa de transporte ciertas condiciones:
1.- Embalaje
Las razones por las que tu mercancía no llega en las mejores condiciones se puede deber a golpes, caídas, humedad, temperatura, objetos externos como pedazos de metal en el transporte y mucho más.
Elegir el embalaje correcto es primordial para asegurar que, independiente de si transportas por aire, mar o tierra, tu mercancía no se estropeará por estas situaciones. Toma en consideración lo siguiente para verificar que tu importadora china o proveedores toman estas precauciones:
Tipo de caja
Parecerá obvio pero en realidad escoger el tipo de caja adecuada para el embalaje hará la diferencia entre un producto dañado y uno en buen estado.
Para cualquier tipo de artículo frágil se aconseja emplear cajas de cartón de canal doble debido al grosor del material, a menos que se trate de antigüedades, obras de arte o muebles, por lo general estas requerirán un contenedor de madera con un mayor índice de durabilidad.
Ya sea cartón o madera es importante recordar que las dimensiones de la caja se deben de elegir a razón del peso y tamaño del producto. Una caja demasiado pequeña se romperá fácilmente, pero una caja demasiado grande hará que el objeto se mueva y rompa en el interior.
Envoltura
Si se ponen varios productos frágiles en una misma caja de cartón, verifica que durante el proceso se envuelven individualmente con varias capas de papel kraft, plástico de burbujas u otra caja de menor tamaño pero igual de resistente.
Esto con el objetivo de evitar que los objetos que tienen contacto uno con el otro se rompan por el impacto aunque sea mínimo.
Material de relleno
Del mismo modo que la envoltura contribuye a que el contacto entre artículos, por descarga y manipulación no sea tan agresivo, así el material de relleno agrega una capa de protección adicional.
Estos suelen ser bloques o láminas de poliestireno, plástico de burbujas, bolsas de aire, cacahuates, viruta de madera, etc., que se colocan entre los productos de una misma caja para reducir o eliminar movimiento.
Etiquetado
Colocar un señalamiento visual a manera de etiqueta con la leyenda “frágil”o “este lado hacia arriba” servirá como un recordatorio y advertencia al transportista de que este paquete debe ser manipulado con extremo cuidado para evitar cualquier tipo de daño.
2.- Tipo de transporte
El transporte que elijas para el traslado de tus mercancías también influye al momento de garantizar la integridad de tus productos. Por ejemplo a través de vía terrestre tus artículos tardarán más tiempo en llegar a su destino y además recibirán mayor movimiento por las texturas y obstáculos que pueda tener el camino.
En cambio por transporte aéreo, la mercancía llegará en una fracción del tiempo estimado, la manipulación será mínima y el traslado mucho más suave. Sin embargo, es cierto que los costos entre uno y otro difieren enormemente por lo que, como empresa, deberás identificar cuáles son tus necesidades y presupuesto.
3.- Carga y descarga
El proceso de carga y descarga puede ser muy dañino para tus productos si no se cuenta con el personal capacitado para el manejo de productos frágiles.
Esta falta ocasiona que tus paquetes sean puestos en el contenedor con demasiada brusquedad o en posiciones que propician la caída de cajas, sobre todo si se colocan una encima de otra sin ningún cincho de seguridad.
Verificar que exista personal capacitado en conducción internacional y nacional, que mantenga un registro y preste atención al etiquetado, así cómo identificar que tu equipo o tus proveedores cuenten con un sistema de embalaje adecuado es fundamental para preservar tus productos.
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